Mucha gente considera que su mascota es algo más que un animal de compañía, es un amigo o un miembro más de la familia. Pues como tal existen leyes y normativas propias para nuestros queridos amigos. Una de ellas es el censo. Igual que ocurre con las personas, que han de estar inscritas en un municipio o población, los animales también necesitan el mismo registro. El problema está en que muchos de sus dueños ven suficiente la identificación de su perro, gato o hurón por medio del microchip. Pero no lo es y no censar a tu mascota te puede costar caro, pues pueden haber sanciones que en el caso de la localidad alicantina de Sant Joan d’Alacant varían entre 60 y 300 euros.
En dicho pueblo hay identificados más de 3.000 canes pero solo unos 300 están censados en el registro municipal y algo similar ocurre en el resto del país. Existen varias causas por las que no hayamos censado a nuestra mascota y existan estas diferencias tan grandes:
- – Que no conozcamos la normativa. Aunque esto es difícil debido a la publicidad de los ayuntamientos o, simplemente, a que otros dueños pueden hablarnos de ella.
- – La pereza que creamos que puede darnos todo el papeleo que conlleva el registro.
- – Que no lo consideremos necesario. Esta es la causa más común ya que mucha gente cree que con el microchip es suficiente.
El censo y el registro de animales domésticos que se hace a través de los ayuntamientos no solo nos permite identificar a nuestros amigos. También ayudan al control estadístico de la población animal, al control de las campañas obligatorias de vacunas y tratamientos, o al cumplimiento de los requisitos en el caso de que tengamos un animal de raza potencialmente peligrosa. Este registro también nos puede ayudar si nuestro compañero se escapa, se pierde o nos lo roban. No dudes en acudir a tu Ayuntamiento para informarte lo antes posible, pues en algunos lugares tienes un mes de plazo para censar a tu mascota. Por lo tanto, si queremos tener un animal doméstico en casa, es necesario censarlo y para ello antes debemos identificarlo electrónicamente con el microchip homologado y que el veterinario nos dé el documento sanitario de nuestro perro, gato o hurón.